Un maestro zen dice que estos 8 hábitos son cruciales para una vida feliz

El zen es siempre un tema difícil de discutir, simplemente porque lo último meta del zen —La iluminación— no es algo que se pueda plasmar verdaderamente en palabras.

La iluminación es algo que solo se puede sentir; una vez que intentas capturarlo, desaparece. Pero estudiar el zen tiene que ver con el sentimiento de iluminación en sí. El Zen se trata de practicar y encontrar la iluminación en sus propios términos.



Con el Zen viene una gran cantidad de sabiduría que uno puede aplicar a su vida diaria. Estos incluyen ideas y valores que la mayoría de las personas dan por sentado o ignoran por su simplicidad, pero una vez que realmente aprovechas al máximo estas verdades universales, puedes encontrarte alcanzando esa iluminación poco a poco y aumentando tu felicidad .

Aquí hay 8 reglas cruciales para una buena vida de un maestro zen:

1) Tenga cuidado con sus palabras y apéguese a ellas

El budismo enfatiza el poder que nuestras propias palabras tienen sobre nosotros. Si bien puede ser fácil descartar las cosas que decimos y pretender que no significan nada, nuestras palabras son mucho más importantes de lo que a menudo nos damos cuenta.

Actúan como nuestros representantes ante el mundo que nos rodea, y cuanto más descuidados seamos con nuestras palabras, menos seremos a los ojos de los demás.

Ocúpate de lo que dices y, lo que es más importante, sigue las cosas que dices.

Se trata de practicar lo que predicas. Si puede comprometerse con una vida en la que la gente sepa que puede confiar en su palabra, entonces aprenderá a respetarse a sí mismo más de lo que podría haberlo hecho de otra manera.

2) Nunca coma para satisfacer

Comer es una de esas cosas que no solemos asociar con ser zen o no ser zen, pero la verdad es que comer sano es una forma importante de regular la mente y el cuerpo.

Puede ser fácil entregarse al hambre y comer hasta que esté satisfecho.

Pero abusar de la comida tiene consecuencias tanto en la mente como en el cuerpo; no solo aumentará de peso y se volverá insalubre, sino que también se debilitará contra la adicción y la tentación.

3) Cada mañana, medita y enciende incienso.

Puede parecer un poco complicado al principio, pero una vez que caes en la rutina, verás que no hay nada más satisfactorio y que contribuya más poderosamente a una vida de Zen que el día a día. meditación temprano en la mañana con incienso.

Todo se combina para ayudarlo a disciplinar su mente y cuerpo: despertarse temprano en la mañana, darse un ritual diario que esperar, el aroma relajante del incienso y la oportunidad de volver a conectarse con usted mismo cada mañana.

4) Sea un héroe y un niño

Cada día es una prueba: las elecciones que hacemos son todas decisiones individuales que dan forma a quiénes somos y cómo interactuamos con el mundo.



Y puede ser difícil saber qué opción es la correcta, especialmente cuando no siempre estamos totalmente familiarizados con las circunstancias y las posibles consecuencias.

La mejor manera de vivir tu vida de acuerdo con las enseñanzas Zen es ser tanto un héroe como un niño.

Esto significa ser intrépido y valiente, dispuesto a dar un paso delante de los demás para protegerlos, como un héroe; pero también significa recordar la importancia del amor y la ternura, ser amable y gentil como un niño.

Una vez que aprenda a combinar estas dos personalidades, podrá comenzar a tomar decisiones con todo el corazón y la mente.

5) Estudie todas las oportunidades

No siempre conocemos las oportunidades cuando se presentan, no hasta que es demasiado tarde. En otros casos, una oportunidad puede parecer tan maravillosa que la aprovechamos de inmediato, preocupados de que nunca vuelva a suceder.

Ya sea que sea silencioso y sutil o ruidoso y desagradable, es importante que estudie cada oportunidad a fondo. ¿Es realmente lo que desea y, lo que es más importante, es realmente lo que necesita?



6) Sé quien eres cuando tengas invitados

Este necesita un poco de explicación, pero básicamente se refiere a vivir en el presente. Cuando tenga un invitado en casa, es importante que se quede, haga lo que haría si estuviera solo y actúe y hable de la misma manera.

Y cuando esté solo, compórtese de la misma manera que si tuviera invitados. ¿Qué enseña esto? Te enseña a respetarte a ti mismo y a tu propio tiempo de la misma manera que respetarías a los demás.

7) Duerme a la hora normal

Dormir determina la calidad de su vida de manera mucho más significativa de lo que cree. Hacer un horario de sueño constante a una hora normal puede dictar la calidad de su próximo día, el próximo y el siguiente.

Reproduzca esta normalidad y consistencia y verá los resultados de inmediato.

8) No llores el pasado: prepárate para el futuro

Si bien un maestro Zen puede estar más preocupado por vivir en el presente, sigue siendo un recordatorio útil para dejar atrás el pasado.

No importa lo que haya hecho, debe tener en cuenta que esas cosas están hechas y desempolvadas; no se pueden revertir.

Es hora de curar tus heridas, arrepentimientos y viejos dolores, y comenzar a hacer un mejor futuro y mañana.